Habrá que revisar más a fondo...
De Marca.com
LA ÚLTIMA TRAMPA DEL ANTIDOPAJE: PENES FALSOS
Aunque en la actualidad es cada vez más complicado vulnerar los controles antidopaje por la rigurosidad con la que se realizan, lo cierto es que algunos deportistas intentan recurrir a diversas tretas que les permitan eludir un control y su posterior sanción. Así lo confirmó ayer durante una conferencia en Sidney el jefe ejecutivo de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA), David Howman, que anunció que los penes falsos y los dispositivos protésicos son los últimos métodos usados por los atletas para burlar estos controles.
Estos artefactos consisten en un bulbo que se introduce en el recto y un tubo de plástico que se coloca debajo del pene y que permite al deportista expulsar orina limpia en el frasco en el que debe depositarlo. Al parecer varios de estos dispositivos han sido enviados a la oficina central de la AMA en Montreal de forma anónima desde Hungría y se cree que son los que usaron los atletas Robert Fazekas y Adrian Annus durante los pasados Juegos de Atenas.
Hay que recordar que el lanzador de disco Fazekas fue desposeído del oro que logró en Atenas después de que intentara dar el cambiazo con un frasco de orina que traía consigo. En el caso de Annus, se obtuvieron dos muestras de orina antes y durante los Juegos y el laboratorio verificó que no correspondían a la misma persona, por lo que al menos una era falsa.
Con respecto a estos métodos, Jordi Segura, director del laboratorio antidoping de Barcelona y miembro de la Comisión Médica del COI, aseguró ayer que la sospecha de que estos aparatos se han utilizado en alguna ocasión no es nueva. De hecho, antes de los Juegos de Barcelona tres atletas alemanas dieron tres muestras de orina iguales, por lo que se sospechaba que habían manipulado la muestra. Sin embargo, ahora lo nuevo es el conocimiento del aparato que se utiliza. A pesar de todo, Segura hace hincapié en el hecho de que es muy difícil que estos dispositivos se usen actualmente durante un control. No es una práctica común porque los controles se realizan bajo una observación y vigilancia directa. Es difícil, pero no imposible, porque cada inspector vigila de una manera, explicó
LA ÚLTIMA TRAMPA DEL ANTIDOPAJE: PENES FALSOS
Aunque en la actualidad es cada vez más complicado vulnerar los controles antidopaje por la rigurosidad con la que se realizan, lo cierto es que algunos deportistas intentan recurrir a diversas tretas que les permitan eludir un control y su posterior sanción. Así lo confirmó ayer durante una conferencia en Sidney el jefe ejecutivo de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA), David Howman, que anunció que los penes falsos y los dispositivos protésicos son los últimos métodos usados por los atletas para burlar estos controles.
Estos artefactos consisten en un bulbo que se introduce en el recto y un tubo de plástico que se coloca debajo del pene y que permite al deportista expulsar orina limpia en el frasco en el que debe depositarlo. Al parecer varios de estos dispositivos han sido enviados a la oficina central de la AMA en Montreal de forma anónima desde Hungría y se cree que son los que usaron los atletas Robert Fazekas y Adrian Annus durante los pasados Juegos de Atenas.
Hay que recordar que el lanzador de disco Fazekas fue desposeído del oro que logró en Atenas después de que intentara dar el cambiazo con un frasco de orina que traía consigo. En el caso de Annus, se obtuvieron dos muestras de orina antes y durante los Juegos y el laboratorio verificó que no correspondían a la misma persona, por lo que al menos una era falsa.
Con respecto a estos métodos, Jordi Segura, director del laboratorio antidoping de Barcelona y miembro de la Comisión Médica del COI, aseguró ayer que la sospecha de que estos aparatos se han utilizado en alguna ocasión no es nueva. De hecho, antes de los Juegos de Barcelona tres atletas alemanas dieron tres muestras de orina iguales, por lo que se sospechaba que habían manipulado la muestra. Sin embargo, ahora lo nuevo es el conocimiento del aparato que se utiliza. A pesar de todo, Segura hace hincapié en el hecho de que es muy difícil que estos dispositivos se usen actualmente durante un control. No es una práctica común porque los controles se realizan bajo una observación y vigilancia directa. Es difícil, pero no imposible, porque cada inspector vigila de una manera, explicó
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