Blogia
UN TOQUE DE AZUFRE Image Hosted by ImageShack.us

Cuanto me aburre mi "blog"...

No sé si es una sensación compartida por muchos de los millones de "bloguistas" que hay por ahí sueltos, pero de vez en cuando atravieso rachas de auténtico hastio y aborrecimiento hacia esta mi cueva, que es lo mismo que decir, claro, que en ocasiones me aburro a mí mismo, me canso de lo que voy a escribir antes siquiera de empezar; tan sólo con pensarlo ya sé, más o menos, la chicha (casi siempre escasa) y la forma de lo que sería el siguiente "post"... y pienso: "bah, ¿para qué?". No es una cuestión de cansancio acumulado, ni de falta de motivación por hacer llegar contenidos creo que jugosos (de segunda mano, lógicamente) a los que aquí entran, sino de algo más incómodo (al menos en mi caso, no sé en el de los demás), que es, ni más ni menos, que la muy limitada curiosidad que yo mismo he acabado sintiendo con los años por mis propias ocurriencias. No es falsa modestia, palabra. Soy tan ególatra como el que más; es decir, como cualquiera que haya hecho de la escritura y la cosa creativa su forma de vida, pero me resulta imposible evitar sentir cada cierto tiempo una profunda decepción ante lo predecible de mis "tics", un insoportable hartazgo ante mis cuatro mecanismos de empaquetado de ideas ajenas, ante lo poco que soy capaz de sorprenderme a mí mismo como escritor, como chascarrillero, como persona... como "bloguista". Este es un "post" desganado, es obvio, y cuyo objetivo no es otro que transmitiros el escaso sentido que durante estos días le he venido encontrando a esto de escribir y ensamblar cosillas en Internet, las cuales, día a día, se van acumulando ahí abajote, como bloques de un Tetris construido a base de "greatest hits" ajenos. De ahí mi silencio.

Además, hay tan buenos "blogs" esparcidos por la ciberselva... Cuantos más los frecuento menos ganas siento de actualizar el mío. Siento que aprovecho mejor mi tiempo leyendo según que cosas de otros que dedicándome a rumiar lo que ya sé. Y lo mismo pienso de vosotros, amigos/as. Mejor haríais pastando en otros campos: esta hierba nunca fue muy nutritiva, creedme.

P.D: Ayer descubrí gracias a Elástico la obra de la fotógrafa Sally Mann (paso de enlazar el nombre, tampoco cuesta tanto usar el Google, ¿no?), y ahora mismo estoy enganchado a bajarme imágenes suyas como un poseso.

0 comentarios